– Si el agua corriente de casa lleva un exceso de cal, no riegues con ella las azaleas.
Podrías hacerlo empleando agua mineral, pero el procedimiento es oneroso.
Más vale que te las ingenies para disponer un sistema que le reste al agua corriente algo de cal.
Coge una botella de plástico grande, quítale el fondo y forra la parte interior del resto de la botella con una media vieja de nylon.
Llénala de turba en sus dos terceras partes; introduce la botella invertida en una regadera y, cuando vayas a regar, llénala de agua a través de la botella y la turba.
Cambia el contenido de turba cada quince días.