UA

Según la
investigadora Ann Coker, de la Universidad de Carolina del Sur “la violencia
psicológica está asociada a las mismas consecuencias que tiene para
la salud la violencia física cometida por un compañero íntimo”.

Tras una
investigación sobre 1152 mujeres llegó a la conclusión de que “las mujeres
sujetas a abusos psicológicos tenían el doble de probabilidades de experimentar
dolores crónicos, infecciones trasmitidas sexualmente, úlceras estomacales,
espasmos de colon, infecciones del tracto urinario y migrañas”. Y son
numerosas las graves consecuencias a las que lleva la violencia psicológica.

Es
tan nociva la violencia física como la psicológica”. Según Silvina Saa,
coordinadora del Equipo de Asistencia a la Víctima de Violencia Conyugal
“hay que salir de un ambiente que enferma”. La prevención es indispensable
para que los hijos no queden atrapados en un circuito de violencia que
también los afecta.” Los hijos repiten el modelo de víctima o victimario”.

“Hay que pedir ayuda, dejar de lado el miedo y la vergüenza y consultar
a un equipo de asistencia psicológica y a un abogado que haga respetar
el derecho de la mujer a conservar su integridad”.

https://analytics.google.com/analytics/web/?authuser=0#/a19873651w39653599p39359059/admin/integrations/adsense/editor/MELVhoLOS4O55HAh2VocUA