– Si el suelo es de madera:
– Dispón felpudos, esterillas, alfombras o similares a la entrada de los lugares de mayor paso, como puertas de acceso o ante aquellos aparatos electrodomésticos frente a los que se suele detener la gente. Retendrán la suciedad y evitarán el desgaste
– Calza las patas de los muebles con trozos de fieltro y evita arrastrarlos sin una adecuada protección.
– Sustituye cualquier rueda de metal o de plástico duro de carritos de tv. o similares por otras de caucho.
– Procura que la temperatura ambiente no exceda de los 21/26º y que las tasas de humedad oscilen en torno al 50/60%. Utiliza un humidificador si es preciso para conseguirlo.
– Barre o pasa el aspirador una vez por semana, como mínimo.
– Enjuaga de inmediato cualquier líquido que haya caído, a fin de impedir que se infiltre entre las planchas de madera.
– Recoge la tierra, arena o cualquier otro material abrasivo para evitar los arañazos.
– Las marcas dejadas por las suelas de los zapatos pueden quitarse con ayuda de un paño húmedo.
– Friega regularmente con un mocho de tiras mojado en una solución limpiadora adecuada.