Limpiar y exfoliar. Pasos básicos.
Lo ideal es que limpies tu cara dos veces al día, por la mañana y por la noche te hayas maquillado o no, con un producto suave y que se aclare con agua.
Además, conviene exfoliar tu piel dos veces a la semana para eliminar las células muertas y dejarla luminosa y radiante no lo hagas todos los días, porque se te irritará la piel.