Se emplea sólo su corteza. El extracto líquido es
ideal para los estados reumáticos, dolor de cabeza y neuralgia. Su
polvo se administra mezclado con una cucharada de miel en dosis de
hasta 10 gramos para la fiebre y el dolor de cabeza. Su decocción
es útil en los casos de fiebres altas y el dolor de cabeza o como
parte del tratamiento contra la artritis.