– El cava puede servirse como aperitivo y acompañar también toda una comida, pero, en cambio, no debe servirse con un postre dulce.
Si vas a servir sólo cava a lo largo de toda la comida, ten presente que es un vino que casa mal con las carnes rojas y los frutos de mar. Puede, en cambio, acompañar perfectamente los pescados magros y las aves.
Para el postre, elige de preferencia un cava semiseco a un brut, pero renuncia a él si vas a servir chocolate o pasteles cremosos.