Busque un espacio silencioso en su casa u oficina donde pueda disfrutar de unos minutos sin interrupciones.
Siéntese cómodamente en una silla o sillón, con sus pies tocando el suelo y los brazos colocados a los lados, con las palmas de la manos hacia arriba. O si la desea puede sentarse en la posición de loto, o hincada entre dos almohadones.
Una vez en posición, cierre los ojos y empiece a sentir como su respiración entra y sale de su cuerpo. Inhale y exhale y concentre su atención en este movimiento.
Sienta el aire entrando por la coronilla de la cabeza, y pasando por el cerebro, el cuello, la columna vertebral. Ahora por todos los órganos del tórax y abdomen, lo órganos sexuales, y luego las piernas.
Sienta el aire que sale por sus pies y llega a la tierra. Con cada entrada y salida de aire de sus pulmones, sienta como sus músculos se relajan cada vez más, sus ojos están pesados, su cara esta relajada, sus brazos, manos, hombros, pecho, abdomen, piernas, pies.
Sienta como su cuerpo se convierte en una masa sin peso, totalmente relajado. Sienta su mente clara, y su cuerpo totalmente centrado en esta experiencia, que flota con dada respiración y la luz y energía que trae el aire respirado.
Ahora, visualice una luz que sale de su corazón y esta irradiando su energía a su mundo interno y emanando esta energía a cada célula del cuerpo. Piensa ahora en sus deseos de paz y tranquilidad que se harán una realidad. Diga ahora sus oraciones o pensamientos positivos que le darán tranquilidad y balance.
Disfrute unos momentos de este estado y luego diga a usted misma/o que abrirá los ojos a la cuenta de 3 estará descansada/o y sintiéndose muy bien y con salud.
