El
pensamiento es una función psíquica de compleja conceptualización. Esta
dificultad se basa en su difÍcil separación de otras funciones como la
inteligencia, las actividades intuitivas o imaginativas o el mismo
lenguaje.
El pensamiento se presenta como una función asociativa de diferentes
aspectos psíquicos, que permite la elaboración de conceptos, juicios y
consecuentemente crear un modelo de realidad.