Psoriasis. Enfermedad dermatológica que origina la inflamación de diversas zonas de la piel con la aparición de escamas.

Localización anatómica: Piel.

Síntomas: Lesiones cutáneas, grietas, enrojecimiento, picor, escamas y dolor en las articulaciones.

Pronóstico (gravedad): Aunque con el tratamiento adecuado no reviste riesgos, salvo en edades extremas, es una enfermedad crónica.

Causas: Reacción anormal del sistema inmunológico que ataca a las células del cuerpo. Esta alteración parece ser de origen genético, si bien algunos factores como los cambios de temperatura, la falta de hidratación, una higiene inadecuada o los estados de tensión emocional agravan los síntomas.

Factores de predisposición: Factores genéticos y antecedentes familiares.

Posibles complicaciones: Procesos infecciosos de la piel, desde donde se pueden extender a distintos órganos del cuerpo.

Tratamiento: Orientado a aliviar los síntomas y evitar complicaciones, dependerá de la zona del cuerpo afectada pudiendo ser tópico -lociones con alquitrán de hulla, champús especiales, lubricantes y corticosteroides-, sistémico -analgésicos, tranquilizantes e inhibidores del sistema inmunológico- o fototerapeútico -exposición a rayos UVA y baños de sol-.

Prevención: No se describen, si bien es recomendable seguir un tratamiento y evitar los factores que puedan agravar los síntomas como el estrés o la falta de higiene.