UA

– Para fundirlo, rállalo o pártelo en trozos pequeños y ponlos en un cazo al baño María.

No lo revuelvas hasta que todos los trozos se hayan fundido; es más, pínchalos con la punta de un cuchillo para asegurarte de que no quede parte dura alguna.

Ten cuidado con el chocolate que quieres fundir, pues un exceso de calor forma grumos y le da un amargor desagradable.

https://analytics.google.com/analytics/web/?authuser=0#/a19873651w39653599p39359059/admin/integrations/adsense/editor/MELVhoLOS4O55HAh2VocUA