– Cuando se produce la mancha, conviene intervenir de inmediato, dejando para después la operación de eliminarla.
Esta primera intervención debe tratar lo siguiente: si el producto caído es sólido, eliminar el máximo posible de él rascando delicadamente con la hoja de un cuchillo; si fuera un líquido, absorber el máximo también, empapando en él un paño; evitar los papeles absorbentes, pues sólo faltaría que a la mancha le añadiéramos la pelusa soltada por el papel.
Si la mancha fuera de grasa sólida, como mantequilla, etc. cubrirla con una abundante dosis de polvos de talco y cepillando unos minutos después con un cepillo de cerdas suaves, sin presionar.
Si no fuera de grasa, empapa la zona interesada en agua a temperatura ambiente.
Como mínimo, el agua disolverá parte de la mancha facilitando las operaciones posteriores.