– Para que no se formen arrugas al poner un cierre a presión, empieza por coser la pieza que lleva el saliente; una vez hecho, frota sobre él un poco de jaboncillo o una tiza.
Dispón las dos partes de la tela que debe unir el cierre, una sobre otra, en la posición correcta, y verás que el saliente ha dejado una marca de tiza en el punto exacto en que deberás coser la otra pieza del cierra, la de encaje.