UA

Sentirse joven, ser mentalmente joven, es una actitud frente a la vida [13-07-2020]

 

Es curioso como la percepción del paso del tiempo por nosotros, o mejor dicho de nosotros a través de él, llega a nuestra consciencia un día, casi siempre por un hecho concreto, anecdótico o traumático, tal vez ocurra algún suceso que nos hace mirar atrás o simplemente en algún lugar, en la cola para acceder a la tienda del barrio o a la farmacia, nos llaman “señor o señora”.

De pronto nos damos cuenta de que hemos envejecido. Nos percatamos, a pesar de la obviedad, de que estamos envejeciendo irremisiblemente. Nos miramos al espejo con cierta sinceridad y somos conscientes de ello. Ahora toca asumirlo con naturalidad, aceptarnos y disfrutar de cada etapa de la vida.

 

Pero es evidente que siempre hay cierto miedo a envejecer, no creo que nadie, incluso el más valiente y seguro de sí mismo, no se lo haya planteado al menos una vez, aunque luego sea asumido y superado inmediatamente. Puede que ese miedo o esas dudas se den porque la vejez se asocia a los aspectos negativos de ésta: las enfermedades, la dependencia, el deterioro físico y cognitivo, la soledad, el cambio de apariencia, la muerte, o también, el miedo a envejecer como otros han envejecido a nuestro alrededor, el miedo a parecernos a ellos.

 

Desde luego, envejecer es inevitable, lo único que podemos hacer es atenuar los “síntomas”, los efectos que se producen en nuestro organismo, cuidarnos por medio del ejercicio, la alimentación, la actividad mental, pero sobre todo por medio de la actitud.

 

Sentirse joven, ser mentalmente joven, es una actitud frente a la vida. Es disfrutar del envejecimiento, es valorar del proceso de aprendizaje, de la adquisición de experiencia, de la sabiduría que van aportando el paso de los años. Es comprender que se puede ser “viejo” con veinte años y “joven” con setenta. todo está en nosotros mismos, en hacer algo más elásticos nuestros límites, en no apagar el entusiasmo ni las ganas de aprender, en no deshacer los sueños e ilusiones, en adaptarnos a los cambios con mente abierta, en mantener la actividad constante, en reforzar la autoestima, en dejar que nuestro rostro sea surcado por las arrugas y si es posible, que éstas sean producto de nuestra sonrisa.

 

Al final, creo que si “digerimos” bien el envejecimiento y lo asumimos de forma natural tiene sus ventajas. Podremos ir haciendo frente a los altibajos de la vida más hábilmente, con mayor sabiduría, con mayor serenidad, con mayor conocimiento. Aprenderemos a saber quienes somos, a conocernos mejor, a querernos, a valorarnos, a respetarnos, a sentirnos cómodos con nosotros mismos, a vivir en paz. Seremos capaces de poner en práctica la sabiduría que aprendimos, que “estudiamos” en la juventud.

 

Buen día a tod@s!!!

Os quiero Bandid@s!!!

“Nos envejece más la cobardía que el tiempo, los años solo arrugan la piel, pero el miedo arruga el alma.” Facundo Cabral

Os dejo con los “maestros del envejecer”, con los incombustibles…The Rolling Stones…vamos!!!…”Start Me Up”….

el-pinche-feliz

Aquí a diario Mis Gastrotapasdesde la “Oronja Home”
https://analytics.google.com/analytics/web/?authuser=0#/a19873651w39653599p39359059/admin/integrations/adsense/editor/MELVhoLOS4O55HAh2VocUA