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Recibo un correo electrónico:

 

Hola, te escribo para pedir tu consejo. Fíjate que tengo un año de haber entrado a trabajar a la empresa para la que laboro.

 

Y estoy muy contento porque me acaban de transferir a una nueva sección donde me promueven a un puesto donde tengo que supervisar a unas 20 personas, ¡pero la mayoría son mayores que yo! Incluso te puedo decir que hay algunos de la edad de mi papá.

 

Llevo apenas dos días, y como podrás imaginar, muchos de ellos no están de acuerdo con la nueva situación. No sé qué hacer, ni cómo actuar para ganármelos. El ambiente en la oficina se siente muy tenso.

Por mi parte, no puedo desaprovechar esta gran oportunidad que la compañía me ofrece, y tengo que demostrar que puedo con este nuevo reto.
Espero tu consejo”.

Hoy es muy común encontrarnos con esta situación, y el caso se complica cuando se trata de una mujer joven. A continuación compartamos la respuesta:

Primero, te felicito por esa promoción. Por otro lado, creo que te funcionaría hacer dos cosas:

  1. Sé amable y accesible con tus colaboradores.
  2. Ejerce tu autoridad desde el principio, pero ten presente esta frase que leí en una oficina de Aeroméxico: “La confianza no se compra, no se vende, no se presta, no se regala… se gana”.

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También te sugiero que los llames a una junta para presentarte y que ellos se presenten. Aquí te doy algunas sugerencias:

  • Antes de organizar la junta, haz tu tarea. Lee la descripción de puesto de cada una de las personas y, de ser posible, estudia su currículum. Esto te servirá para conocerlos y saber qué puedes exigirle a cada uno.
  • Antes de la reunión, salúdalos de mano y repite su nombre, como si estuvieras aprendiéndolo de memoria. Asegúrate de que en el lugar haya café, galletas y refresco; esto favorece que la junta sea cálida, además de que le da un tono de celebración.
  • Comienza por decirles que estás impresionado por lo competentes que son. Después, menciona lo contento que estás ante este nuevo reto y transmíteles la confianza que sientes de trabajar con tan buen equipo (procura ser honesto y verte relajado).
  • Una vez que hablaste de ellos, platícales acerca de tu experiencia, tu carrera y el esfuerzo que realizaste antes de obtener esta promoción. Es importante que lo digas sin ser presuntuoso, si lo haces de una forma directa, clara y sencilla, causarás una buena impresión.

También es bueno que solicites su colaboración para que puedan superar juntos los retos particulares que tiene el departamento.

Recuerda que ellos buscarán en ti a alguien capaz de crear y motivar, de solucionar problemas con razonamientos lógicos. Sin importar qué edad tengas, ellos esperan que seas una persona madura y estable, tanto en tu vida personal como en lo profesional. También, esperarán verte como alguien dinámico, con actitud positiva, con un espíritu abierto a la crítica y con un gran deseo de ayudarlos a crecer.

En otras palabras, es tu trabajo persuadirlos a que confíen en ti como digno dirigente de su esfuerzo cotidiano.

Al principio te costará trabajo porque, en ocasiones, los seres humanos nos resistimos a los cambios. Esfuérzate para que tu ejemplo y tu trabajo sean lo que los conquiste.

Por último, comparto contigo este pensamiento: “Recuerda que para triunfar, uno tiene que creer que se merece ese triunfo. Uno debe tener una imagen positiva de sí mismo, tan tangible como para alargar la mano y tocarla”.
¡Mucha suerte!

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