UA

 

Lo siento, perdóname, gracias, te amo.

 

Hoy le hablo a mi niño interior y le pido perdón por todo aquello que no hice por él.

 

Le pido perdón por no haberle atendido mejor, por no haberle escuchado cuando me necesitaba.

 

Siento haberle juzgado tanto. Siento haberle traicionado y exigido tanto. Siento dolor por el dolor que le he causado y por eso le digo que “lo siento”. No era yo quien manejaba los hilos de mi vida, estaba dormido e hipnotizado.

Gracias por estar ahí siempre aunque casi nunca te escuché.

Gracias por salir de vez en cuando y hacer que me sintiera como un niño a pesar de mi edad.

Gracias por ser lo que eres sin prejuicios y sin exigencias. Por haber permitido tantas cosas, a pesar de no estar de acuerdo, y que hoy siento que fuera así.

nino-interior

A partir de ahora ya no será igual, no te preocupes. A partir de ahora te escucharé y te tendré en cuenta cada vez que tome consciencia de tu presencia que espero sea casi siempre.

A partir de ahora procuraré no razonar más tus sentimientos y dejar de juzgarlos.

A partir de ahora estaré ahí presente para poder escucharte y atenderte.

Gracias por traer a mi vida la inocencia suficiente para poder recuperar la ilusión de lo que nunca te concedí.

No podría dejar de amarte aunque lo intentara a pesar de aparentar que no te quise nada.

Si no fuera por ti yo no estaría aquí pero que mal te lo agradecí.

Hoy te pido que me perdones por tanto maltratarte, obligarte, ignorarte, dañarte…

Hoy te pido que me hables más que nunca y patalees si ves que no te atiendo.

Hoy te pido que me grites si hace falta porque sin ti yo no sé elegir bien para los dos.

Hoy te pido que me permitas abrazarte como nunca lo hice y consiga darte el calor que nunca te di.

Siempre estuviste conmigo, formaste parte de mí y siempre lo estarás, no puedo sacarte de mí aunque quisiera, por lo que, sería una lucha perdida si quisiera estar en guerra contigo, la perderíamos los dos y ambos sufriríamos inútilmente al igual que hemos sufrido hasta ahora por no atenderte. Por ello…:

Hoy decido amarte y respetarte por el resto de mi vida, decido compensarte y darte todo lo que necesites para que podamos ser felices.

Hoy decido estar en paz contigo y conmigo porque ambos nos lo merecemos.

Hoy decido confesarte que, por fin, ya te he visto: Lo siento, perdóname, gracias, te amo.

 

Con amor para “mi niño interior”

 

“Estar en paz es el estado perfecto para poder convivir con la incertidumbre y abrirnos a una vida mejor y que no tiene que ser, siempre o forzosamente, una vida de riqueza material, sino una vida de riqueza interior con equilibrio emocional, pero la ignorancia sobre nosotros mismos, principalmente, y la resistencia al presente nos lo impide.

 

A veces se necesita de toda una vida para reparar o sanar ciertas memorias, es como entregar la vida a cambio de… Pero no todas las personas tienen por qué hacerlo así, no siempre tenemos por qué gastar una vida entera para sanar algo, sobre todo si no somos felices”.

Autor

María De La Paz Morgado Morillo
https://www.maripazmorgado.es/

https://analytics.google.com/analytics/web/?authuser=0#/a19873651w39653599p39359059/admin/integrations/adsense/editor/MELVhoLOS4O55HAh2VocUA