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– Soy abogada y como tal debo atender a todo tipo de personas.

Quizás por ser una cuestión de humanidad he aprendido a ponerme en el lugar de esas personas y no juzgar su conducta cuando son delincuentes, comprender el dolor de una madre que llora porque su hijo esta preso, o el dolor de una mujer que ha sido violada.

Siempre trato de mirar a los ojos, y busco la mirada de quien se siente avergonzado y esquiva mirar, pero muy independiente de ello, veo dentro de ese cuerpo una persona, un ser que sufre amargamente de acuerdo a la posición que el destino le ha trazado, a veces, es difícil no llorar al escuchar los relatos y la desesperación, pero he aprendido a controlarme y tener la fortaleza para tratar de dar consuelo o un consejo.

Mi misión en el mundo aún no sé cual sea, pero realmente disfruto el escuchar a la gente y ayudar en cuanto puedo.

Me encuentro a veces abrumada y me da por escribir, un día escribí esto, espero les guste:

“Empieza, Nada termina…”

En el punto de la nada, es justo ahí donde dicen que se llega al fin del mundo. Del mundo terrenal al menos.

Quien aquello conoce habla con razón. ¿Qué caminos tiene ese lugar que llevan a alguna parte y de ahí no continúan? Acaban. Acaban benditamente porque en realidad lo que hacen es empezar. Empiezan la vía de lo de allá, de lo que no se ve, de lo que te rodea sin palparlo y lo sientes sin sentirlo.

Esos que dicen que están encantados, con un encanto brujo para algunos y mágico para otros. Para todos, con misterio.

Esos caminos que acaban y no continúan, son campos de lo irreal. Esa Luz que nunca muere… y a la cual avanzas súbita e irremediablemente. No, no pienses por ningún motivo que has llegado al final, simplemente tu pesar ya termino.

Tu deambular por el mundo terrenal a llegado a su punto máximo de expansión, has evolucionado ahora estas en la nada al empezar.

Lo vivido, lo pasado ya pasó, el tiempo suspende su marcha. Caminante. Si llegas al punto de la nada, sigue la ruta, olvida el tiempo, el destino, la idea.

Limpia tu mente y toma el camino que acaba para empezar. Duerme y descansa, recuerda lo que fue y parece morir viviendo.

Ahora sólo estás…estás solo y nada más. Vuelve para empezar a comenzar el final.”

Cuestión de humanidad. Vuelve para empezar a comenzar el final

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