– Un buen aclarado debe ser abundante y de una duración mínima de 3 minutos, sobre todo si llevas el pelo largo. Los cabellos bien aclarados crujen bajo la presión de los dedos.
– Empieza a aclarar con agua tibia y acaba con fría: así las escamas de keratina volverán a cerrarse unas sobre otras, dando al pelo un aspecto liso y brillante y dejándolo menos vulnerable a la penetración del polvo y la suciedad.
– Enjuaga con una toalla limpia, sin frotar, y con la cabeza hacia abajo para airear las raíces y darle volumen al pelo.