– Los aceites esenciales se obtienen por destilación.
Penetran en el organismo por el sistema circulatorio, aunque también pueden hacerlo por las vías respiratorias, y así inhalar su aroma puede tranquilizar o, por el contrario, revitalizar.
Sus características principales son:
Limón: estimulante, astringente. fortificante.
Aguacate: regenerador.
Menta: estimulante, tonificante.
Perejil y romero: rejuvenecedor.
Lavanda: antiséptico, cicatrizante
Geranio: astringente.
Manzanilla: antiinflamatorio.
Albahaca: purificante y cicatrizante.