Cistitis. Infección que origina la inflamación de la vejiga.

Localización anatómica: Vejiga.

Síntomas: Micción frecuente, ardor, dolor, sensación de quemazón al orinar, incontinencia y fiebre si existe infección prostática o renal.

Pronóstico (gravedad): Aunque no reviste gravedad, resulta dolorosa y molesta y requiere atención médica.

Causas: Anomalías en las vías urinarias bajas, lesiones en la pared vesical o frío. En las mujeres a veces aparece a partir de la infección crónica del cuello uterino y en los hombres de la inflamación de la glándula prostática.

Factores de predisposición: Factores genéticos, embarazo, actividad sexual, problemas intestinales, alteraciones de la vejiga y vías urinarias.

Posibles complicaciones: Evolución hacia formas crónicas.

Tratamiento: Antibióticos de amplio espectro, calor en el bajo vientre, agentes alcalinizantes de la orina e ingestión de abundantes líquidos.

Prevención: Ingerir agua en abundancia, evitar la exposición al frío, así como a focos infecciosos, higiene diaria adecuada y medidas profilácticas durante las relaciones sexuales.