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Esta parece ser la pregunta del millón, y es que,
ciertamente, aquí sí que no hay normas establecidas.

Cada persona es un mundo y cada
cuero cabelludo tiene sus necesidades.
Sólo tienes que atenderle y escuchar qué
necesita, qué te pide. Sólo así sabrás cómo mantener su estabilidad y ganar en
belleza pero sin perder en salud.

El objetivo: un pelo limpio, bonito y sano. Y sin abusos
de jabón.

Cada persona, dependiendo de si su pelo es
graso o seco, corto o largo, claro o moreno, tiene sus propias necesidades (aunque a veces
también se trate de manías) y pocos se ponen de acuerdo acerca de la frecuencia de
lavado ideal.

Lo que sí aconsejan los dermatólogos y los estilistas más profesionales
es que hay que frenar el abuso (cada día, con jabones diferentes…), que maltrata el ph
de la piel e incluso acaba provocando heridas, irritaciones o caspa por un mal enjuague.


Aquí tienes los consejos que más te
interesan para estar bonita sin tener que sufrir ni lamentar “víctimas”. Toma
nota, y a las dos semanas te garantizamos que obtendrás los primeros frutos
.


Cabello graso


¿Crees que un exceso de grasa es excusa
suficiente para lavar tu pelo diariamente con toda suerte de champús del mercado, a cada
cuál más diferente?

Debes saber que en tu caso lo mejor es un champú especializado (por
ejemplo de ortiga, kiwi… o si lo prefieres cualquiera de venta en farmacias que esté
recomendado para ese uso) y que debes evitar, como hacen muchas, lavar tu pelo con el
mismo gel que utilizas para el cuerpo.
La piel de la cabeza duplica o incluso triplica en
sensibilidad a la del cuerpo. La temperatura ideal para tu cabello es en tu caso la tibia,
o incluso la fría, que ayuda a resecar, y el masaje debe ser siempre suave pero
consistente, sin fricciones desmesuradas.


Lo ideal: resistirse a la tentación y
lavar el pelo un día sí y otro no como mucho.
Seguro que no se ve tan sucio como tú te
crees… Con el tiempo, podrás incluso separar en dos días el momento del baño, porque
tu pelo habrá ganado en confianza. Y tú también.


Cabello seco



Tienes suerte de que tu pelo no te
exija demasiados “baños”
, aunque, eso sí, te veas obligada a recurrir a otros
productos complementarios al champú de rigor, como regeneradores o suavizantes (que en el
caso del cabello graso quedan terminantemente prohibidos) y nutrientes, entre los cuales
te recomendamos especialmente aquellos derivados de productos naturales y no tan sujetos a
la química
.


En general, con un lavado semanal, y
siempre haciendo uso de los productos recomendados, tienes suficiente.
Pero si notas que
con los días tu pelo pierde vida y brillo (algo muy común en este caso), puedes optar
por ampliar la propuesta a dos lavados semanales, tras los cuales puedes prescindir
perfectamente del secador, que no hace sino dañarte y añadir sequedad a tus puntas.


Cabello normal


El mercado de champús y productos
especializados para el cabello ha puesto en tus manos todo un abanico de posibilidades
que, sin excepción, ayudarán a tu cabello nutriéndolo, suavizándolo, protegiéndolo,
regenerándolo… y todo eso sin daño alguno
. Tu tipo de cabello tiene la ventaja de
superar fácilmente los excesos y no requerir demasiada dedicación.



Pero si te interesa su salud y su brillo,
te recomendamos que como máximo lo laves tres veces a la semana con un champú llamado de
“frecuencia”
(nunca el mismo gel del cuerpo), al que puedes añadir una vez por
semana o incluso cada quince días un pequeño tratamiento de nutrientes como, por
ejemplo, mascarillas capilares naturales.

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