UA

– Todo sucedió el 31 de Julio de 2006, y recuerdo que esa noche estaba acostada tratando de dormir porque en unos cuantos días más tendría unos exámenes que determinarían si yo sería aceptada a una Universidad de Florida.

Recuerdo que esa noche no podía conciliar el sueño porque temía que esos exámenes no los pasaría y tendría que regresar a México. Esa noche no sentía ganas de hincarme y orar así que en mi lecho acostada sólo dije estas palabras “Señor ayúdame, dame sabiduría para pasar esos exámenes”. Cuando acabé de decir eso sentí un escalofrió en mi cuerpo y sentí a alguien que tocó mi hombro y me dijo con una voz muy dulce. “No te preocupes, yo no te he traído de tan lejos para que fracases. No estás sola pues yo estoy contigo. Ten fe y saldrás adelante, sólo ten fe.”

En ese instante abrí mis ojos y vi que el cuarto estaba iluminado. Sentí una alegría en mi vida y una paz inolvidable porque sabía que Dios había escuchado mi petición. A los pocos días fui a tomar los exámenes y cuando me los dieron sabia que los pasaría, no sólo porque había estudiado sino porque había confiado en Dios.

Ahora la Universidad ya me aceptó y ya voy para mi 2º año. Le doy gracias a Dios por ello. Lo que todavía me pregunto en quien fue a visitarme esa noche de Julio. ¡Sólo Dios lo sabe!

Todavía me pregunto en quien fue a visitarme esa noche

https://analytics.google.com/analytics/web/?authuser=0#/a19873651w39653599p39359059/admin/integrations/adsense/editor/MELVhoLOS4O55HAh2VocUA