Uno de los mayores inconvenientes de llevar el pelo teñido es el tener la obligación de acudir a la peluquería cada cierto tiempo.
Hoy en día esto no es estrictamente necesario, existen productos en el mercado que facilitan enormemente el proceso de teñido.
Basta seguir algunas recomendaciones.
Lavar el pelo. Antes que nada es necesario lavar el cabello en profundidad. A continuación llevar a cabo un buen cepillado y secarlo ligeramente, de manera que quede un poco húmedo.
Aplicar el tinte. A continuación se aplica el producto según las explicaciones que vienen en el envase. Recordar que, en algunos productos hay que mezclar una crema colorante con una base de champú y en otros sólo se usa un gel. Estos últimos son más sencillos de utilizar.
Modo de aplicación. Siempre se comienza por las raíces y se acaba en las puntas. Cuándo está todo el pelo cubierto es recomendable ejercer un masaje sobre el cuero cabelludo. Después se debe cubrir el cabello con un plástico. Si se tiene una toalla que no importe manchar, también se puede utilizar.
Fijarse en los tiempos. Una vez aplicado el producto, basta dejar transcurrir 30 minutos para retirarlo. Sin embargo, es importante fijarse en el tiempo que se ha tardado en aplicar el tinte en la raíz. Conviene recordar que las puntas cogen antes el color.
Lavado final. Transcurrido el tiempo se lava el pelo de nuevo y se aplica una crema fijadora suavizante.
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