– Una lámpara suspendida sobre la mesa del comedor debe disponerse a 60 cm. de distancia de la superficie de la mesa.
Esta altura es la adecuada para que los comensales puedan verse entre sí sin resultar deslumbrados.
La pantalla será opaca, o como mínimo translúcida, tanto para concentrar el foco de luz sobre la mesa como para que no moleste a quienes se sienten a ella.
Debe preverse también la eventualidad de que la mesa se alargue y disponer de iluminación adicional para el caso.
Para que los platos que se sirvan luzcan en todo su esplendor debe atenderse a la calidad de reproducción de los colores de la luz.
Normalmente lo más adecuado es utilizar bombillas tradicionales o halógenas.
Evita los fluorescentes.
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