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– Los cacharros de aluminio quedan como nuevos si cueces en ellos mondas de patatas o de manzana, aunque también quedan muy bien con una mezcla de un litro de agua y dos cucharadas de té de cremor tártaro o, en su defecto, una cucharada de vinagre por litro de agua.

Si fueran de acero, límpialos con vinagre.

Las sartenes de hierro se limpian por fuera con un estropajo de acero y un cepillo; después se calienta levemente y se vierte un poco de agua salada, de forma que cubra el fondo de la sartén.

Finalmente, se acaba pasando un trozo de papel de seda.

Si están particularmente sucias, un buen limpiador es una mezcla de aceite y sal.

Las manchas resistentes en cazos y potes metálicos suelen desaparecer si cocemos en ellos una solución de agua jabonosa.

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