– Pulgones: En el reverso de la hoja se hallan pequeños insectos de 1-4 mm de longitud. Las partes afectadas de la planta quedan cubiertas por una especie de melaza sobre la cual pueden desarrollarse hongos como la negrilla. Los pulgones transmiten con frecuencia enfermedades viróticas.
– Cochinillas: Se distinguen dos tipos principales:
Con caparazón duro, presentándose en diversas formas, tamaños y colores. Dan la impresión de permanecer inmóviles.
Algodonosas, Producen una sustancia de aspecto algodonoso.
Ambos tipos debilitan considerablemente las plantas, chupando su savia.
– Mosca Blanca: La mosca blanca está emparentada con las cochinillas y al igual que éstas, causa daño al succionar la savia de las plantas. Las hojas afectadas muestran manchas amarillas y mueren. Como el insecto se multiplica rápidamente, es aconsejable tratar en el momento de aparecer los primeros síntomas.
– Orugas: Existe un gran número de especies de orugas, por lo cual el daño que causan puede ser muy variado. Algunas producen mordeduras en las hojas y brotes tiernos. Otras se alimentan en el interior del tallo o de los frutos.