– Para embotellar una fruta:
Cuando sea todavía pequeñísimo, tanto como para pasar por el cuello de una botella, tiende una cuerda desde el árbol a un soporte cualquiera y sujeta una botella con papel adhesivo.
Introduce la fruta en la botella transparente.
A medida que la fruta crezca asegúrate de que la botella siga bien sujeta. Una vez madura, arráncala del árbol y caerá al fondo de la botella.
Llena la botella con cualquier jarabe y tápala.