– La porcelana es una pasta finísima, translúcida y compacta, constituída por caolín, cuarzo, feldespato y otros minerales.
Pese a su aspecto frágil, es muy resistente.
No debe sufrir variaciones bruscas de temperatura.
No la metas en el horno, pues el esmalte se resquebrajaría y perdería su brillo.
– Análogamente no conviene meter nunca la porcelana en el microondas, pues no sólo estropearíamos la decoración del plato, sino también el horno.