UA

– Si unos encajes amarillean por efecto del tiempo, puedes probar a blanquearlos siguiendo este procedimiento: dobla los encajes, mételos en una bolsa de tela blanca y ponla a remojo durante 24 horas en un recipiente con aceite de oliva.

A la mañana siguiente, saca la bolsa del aceite y sumérgela un cuarto de hora en agua hirviendo con abundante jabón. Aclara a conciencia.

Disuelve almidón en agua y sumerge la bolsa con los encajes en ella.

Sácalos de la bolsa y plánchalos sin esperar más

– Si un encaje antiguo amarillea sin remedio, oscurécelo a base de un baño de té fuerte.

https://analytics.google.com/analytics/web/?authuser=0#/a19873651w39653599p39359059/admin/integrations/adsense/editor/MELVhoLOS4O55HAh2VocUA