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– El bicarbonato tiene infinidad de aplicaciones. Perfecto desodorante de axilas y pies, blanquea la dentadura y limpia la plata.

– Limpia el termo llenándolo de agua, echando unas cucharadas de bicarbonato y dejándolo así toda una noche.

Pon un fondo de 2 cm. de bicarbonato en el cenicero del coche. Evitarás el molesto olor de las colillas.

– El olor a leche regurgitada en las prendas de los bebés se evita aplicando una pasta hecha con bicarbonato sódico y agua.

– Los azulejos muy sucios quedan como nuevos frotándolos con una pasta a base de bicarbonato y lejía. Aclara bien después.

– Las esponjas de cocina quedan como nuevas dejándolas por una noche en remojo en agua con bicarbonato sódico.

– Si quieres quitar el moho de una cortina de ducha, frota las manchas con bicarbonato sódico.

Disuelve un poco de bicarbonato sódico en agua y lava con esta solución los cristales y los faros del coche.

– Prueba a desatascar un lavabo obstruído vertiendo un litro de agua caliente en la que se habrán disuelto 100 gr. de bicarbonato.

Disuelve bicarbonato sódico en agua. Esta solución es excelente para quitar malos olores del termo.

Una cucharada de bicarbonato de sosa en el agua del último aclarado confiere esponjosidad a las prendas de cachemira.

– Para quitarle el mal sabor a la leche quemada se pone a hervir de nuevo con un poco de bicarbonato.

Una cucharada sopera de bicarbonato sódico añadido al detergente de la lavadora elimina de la ropa cualquier olor a sudor.

– Agua caliente y un poco de bicarbonato es el mejor remedio para una cafetera o tetera que huelan mal.

– Lava la nevera o el congelador con una solución de 2 cucharadas soperas de bicarbonato en 1 litro de agua caliente.

Obtendrás una masa para empanadillas ligera si le añades una pizca de bicarbonato.

– Una solución ideal para el terrazo, y que lo deja como nuevo es la siguiente: Toma cuatro litros de agua tibia, añádele media taza de lejía, un cuarto de taza de bicarbonato y un cuarto de taza de vinagre.

Media cucharadilla de café añadida al vaso de un zumo de frutas lo transformará en bebida gaseosa.

Una pizca de bicarbonato en el agua del florero, prolonga la vida de las flores.

100 gr. de bicarbonato sódico puestos en la nevera evitarán la formación de malos olores.

– Si se lo emplea como dentífrico, en vez de o además del habitual, se obtienen unos dientes más blancos

– Echa una cucharada sopera en el agua con que vayas a lavarte la cara. Te proporcionará una suavidad de piel envidiable. Esta mezcla alcalina es ideal para la tez.

– Si eres deportista y quieres recuperarte de un esfuerzo, añade 200 gr. de bicarbonato sódico al agua de la bañera.

Si sólo se trata de un baño de relajación, bastarán 7 u 8 cucharadas soperas.

– Frota con bicarbonato la mancha de grasa que haya caído en la alfombra, deja transcurrir 5 minutos y pasa el aspirador.

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