UA

Existen elementos externos que producen sequedad y envejecimiento prematuro.

La solución está en cambiar algunos hábitos.

Se puede empezar por consumir vitaminas A y C, presentes en frutas y verduras.

El mercado dermocosmético también ofrece fórmulas que son verdaderas barreras contra la intoxicación cutánea.

Contaminación, tabaco y mala alimentación, entre otros, dañan la piel porque obstruyen los poros con toxinas, haciéndola reflejar hacia afuera lo mal que estamos por dentro.

De algunos componentes venenosos no se puede escapar fácilmente. Más bien, hay que tomar las medidas para minimizar su efecto nocivo, es decir, aprender a vivir con ellos.

En algunas ciudades, la contaminación ambiental es tan alta que respirar allí es como fumarse 10 cigarrillos al día. Usted puede ayudar a su cuerpo a neutralizar estas consecuencias tomando antioxidantes, como vitamina C, o recurriendo a protectores específicos para la piel que vienen en formulaciones dermatológicas o cosméticas de avanzada.

Los dermatólogos describen el daño que provocan en la piel los siguientes agentes venenosos. Tome nota.

* El cigarrillo. En la piel produce una tonalidad amarillenta. Las toxinas agravan el acné y el lupus, que es una enfermedad reumatológica. El tabaco disminuye la irrigación sanguínea, lo que conlleva al cambio en la coloración y la fragmentación en las fibras elásticas en la piel, por eso las personas que fuman se ven hasta 15 años mayores de lo que realmente son.

* Radiación ultravioleta. El exceso de sol causa enrojecimiento de la piel y aumento de pecas y manchas. Incluso puede inducir a que los lunares se hagan mucho más irregulares y pigmentados, se transformen en lesiones premalignas o malignas. Por eso se recomienda usar protección solar y física, es decir, no exponerse entre las 10 de la mañana y las tres de la tarde, usar sombrero que bloquée la penetración solar y ocupar ropa de fibra textil bastante densa para evitar el exceso de transpiración.

* Solarium. La radiación concentrada tiene efectos nocivos para el organismo y con sólo dos minutos de solarium puede haber lesiones en la piel. Las consecuencias son aumento de pigmentación, fragmentación de las fibras elásticas y alteraciones en factores inmunológicos de la piel. Este daño se manifiesta antes que el de la exposición solar, con enrojecimiento de la piel, manchas y pecas.

* Comida grasa. Pueden aparecer ciertos depósitos de colesterol en la piel que se ubican cerca de la cara y los ojos. Se manifiestan como una erupción en la piel de color amarillenta. Es recomendable no exagerar con comidas picantes, muy condimentadas, calientes y ácidas.

* Alcohol. El consumo excesivo provoca problemas en la piel, pero su efecto es más negativo en algunas enfermedades específicas. En gran cantidad, aumenta la psoriasis: la piel forma placas muy densas que son de color blanco plateado. Las personas que padecen rosácea deben medir la ingesta de vino tinto. El alcohol se elimina en parte por la piel, por lo que se pueden producir deshidrataciones excesivas. Beber mucho lleva a la dilatación de vasos sanguíneos y a graves problemas hepáticos.

* Café. Es importante diferenciar las clases de café. La versión en grano, contrariamente a lo que se piensa, tiene un buen efecto en la salud. Se ha estudiado que las personas que consumen café en grano disminuyen los problemas de sobrepeso, la tasa de depresión y tienen menos problemas celulíticos. Sin embargo, no lo deben beber las personas que tienen rosácea, los que tengan dificultades cardiovasculares y los que padezcan palpitaciones cardíacas anormales o que tengan crisis de pánico.

* Estrés. Casi todas las enfermedades de la piel se agravan con el estrés porque estar bajo presión modifica las respuestas inmunológicas del organismo. El acné, la psoriasis y la dermatitis seborreica aumentan con el estrés. Se manifiestan con granos, urticaria y alergia.

* Mala práctica del deporte. Hacer ejercicio es una arma de doble filo. Por un lado, estimula la circulación, la función muscular y elimina ciertos productos metabólicos. Pero puede producir daño si lo realizamos en forma excesiva bajo mucho calor, ya que se expone a la piel a alta temperatura y la somete a un aumento de la sudoración, formando pequeños granitos en la piel. Es importante que la gente que practica jogging no use ropa sintética, porque el roce con la piel puede producir dermatitis. Se recomienda la fibra natural.

* Hierbas. Aunque la mayoría toma hierbas porque se consideran saludables, algunas pueden tener un efecto nocivo para determinadas pieles. Por ejemplo, el gingseng, la sang yong o el ginkgo biloba pueden producir dermatitis, hemorragias o bajas de glicemia.

* Medicamentos. La pasta de dientes que tenga mucho flúor puede provocar acné alrededor de la boca. Los productos que contienen litio también pueden inducir la aparición de acné. Los corticoides en exceso pueden producir adelgazamiento de la piel, aparición de estrías o dilatación venosas. Hay que tener cuidado con la automedicación de las cremas para los hongos porque algunas contienen corticoides.

* Agua con cloro. El agua de Santiago seca mucho la piel. Las duchas deben ser lo más cortas posible y a temperatura no muy alta. Esto no ocurre con el agua que uno bebe, porque nuestro estómago produce cloro, lo que apacigua el efecto.

* Mal sueño. No dormir bien conlleva a alteraciones en los ritmos biológicos, en ciertas secreciones hormonales y en la circulación linfática, lo que se refleja en las ojeras. Se recomienda dormir mucho.

* Sauna. Estos baños someten a la piel en forma exagerada a altas temperaturas, lo que produce un efecto cardiovascular negativo. Las consecuencias son enrojecimiento e irritación.

Linea Separadora TnRelaciones Consejos para tu belleza

Nota: Si quieres contactar y ser atendida/o por los mejores profesionales de la Estética y Belleza de tu País o lugar de Residencia. Clic Aquí.

https://analytics.google.com/analytics/web/?authuser=0#/a19873651w39653599p39359059/admin/integrations/adsense/editor/MELVhoLOS4O55HAh2VocUA