Conjuntivitis. Inflamación de la mucosa conjuntival, la membrana transparente que cubre la parte externa del ojo.

Localización anatómica: Ojos.

Síntomas: Inflamación, irritación, picor, quemazón, enrojecimiento, sensación de arenilla y segregación de pus.

Pronóstico (gravedad): No reviste gravedad.

Causas: Agentes exógenos agresivos, como el polvo, bacterias, el agua de las piscinas y playas, y los insectos; y endógenos, como son algunas enfermedades eruptivas de la infancia –varicela y herpes–.

Factores de predisposición: Factores congénitos, alergias y pequeños traumatismos.

Posibles complicaciones: En el caso de las conjuntivitis infecciosas debe tenerse cuidado para no contaminar otros órganos. Salvo en el caso de los recién nacidos no revisten ningún riesgo importante.

Tratamiento: Colirios antisépticos, pomadas antibióticas en los casos infecciosos e higiene rigurosa.

Prevención: Proteger los ojos en piscinas y playas, evitar ambientes sucios o excesivamente contaminados y mantener hábitos higiénicos.